top of page
  • Facebook
  • Twitter
  • LinkedIn
  • Instagram

Lala Pasquinelli

Lala Pasquinelli es activista, comunicadora, abogada, poeta y fundadora de "Mujeres que no fueron tapa", un proyecto que tiene como objetivo transformar miradas y entornos de la sociedad que generan estereotipos femeninos en distintos ámbitos. (foto)

Entrevista Lala Paquinelli
00:00 / 05:03

¿Qué es el proyecto "Mujeres que no fueron tapa"? ¿Hace cuánto y por qué trabajas en el mismo?

​

Trabajo en “Mujeres que no fueron tapa” hace seis años. Este es un proyecto que intenta hackear y desnaturalizar los discursos de la cultura masiva sobre cómo debe construirse la feminidad, la identidad de las mujeres que nacen con vulva y  cuál es el rol social que debemos cumplir. Todo esto se nos enseña a través de diferentes discursos que tiene la cultura.

Me parece que es importante el trabajo que hacemos ya que ha transformado la vida de muchas mujeres y eso nos incentiva para que lo sigamos haciendo

​

¿Qué significa este proyecto  para vos?

​

Para mí, personalmente, es parte de mi vida al 100%, es el proyecto en el cual trabajo y le dedicó la mayor parte de mi tiempo. Toda la energía creativa está puesta en “Mujeres que no fueron tapa” porque me encanta lo que hago, me gusta mucho lo que vuelve, ya que generalmente esta buenísimo.

​

¿Cómo crées que tu proyecto ayuda a generar conciencia?

​

Creo que siempre han existido proyectos como “Mujeres que no fueron tapa”, colectivos, activismos diferentes a lo largo de la historia que buscan poner en palabras toda la opresión que estos sistemas tan homogeneizantes ejercen sobre los cuerpos de las personas. Creo que siempre ha sido necesario, que es necesario y que lo que hace es poder contrarrestar un poco que existen otras alternativas… que esto que nos dicen que es lo natural, lo verdadero o lo que debe ser, quizás no es así porque hay otras historias y experiencias, existe gente que vive muy por fuera de lo que “debe ser”.

De esta forma se genera una sensación de no falla. No soy yo la que está rota, no soy yo la que está fallada porque mirá hay un montón de personas como yo a la que le pasan cosas similares y piensan parecido a mí.

​

¿Conocés lo que es el movimiento Body Positive? ¿Cuál es tu opinión al respecto?

​

A mí me gustan todos los movimientos relacionados con la diversidad corporal que tienen una perspectiva política y una crítica sistémica como lo es el Activismo Gordo y parte del Body Positive ya que ponen a circular otras representaciones de las corporalidades como lo estamos haciendo nosotras en la campaña de #HermanaSoltaLaPanza. Lo que no estoy de acuerdo es con los movimientos que promueven una aceptación individual o que hay una responsabilidad individual en que vos te sientas mejor ya que es un discurso que se vuelve hegemónico ya que eso se logra únicamente colectivamente, conversar con otras y consumir esas imágenes y relatos diversos.​

​

¿Crées que las redes cumplen un rol importante fomentando estos estereotipos?

​

Sí, totalmente ya que la influencia de las mismas son determinantes. Hoy en día las redes cumplen un papel decisivo sobre todo en cómo está funcionando en las adolescencias, las juventudes y las infancias que son generaciones nativas de estas plataformas mostrando únicamente hegemonías corporales.

​

¿Sentís que hubo un cambio por parte de la sociedad gracias a estas campañas y proyectos como Mujeres que no fueron tapa?

​

Me parece demasiado decir que hubo un cambio en la sociedad gracias al proyecto pero creo que sí hemos logrado instalar conversaciones, por lo menos en Argentina, y eso para mi ya es un montón. Por ejemplo en este momento, la campaña de #HermanaSoltaLaPanza que está en todos los medios nacionales.

​

​

​

#HermanaSoltaLaPanza

La cuenta de Instagram denominada “Mujeres que no fueron tapa” divulgó una campaña con el fin de acabar con el estereotipo que se les impone a las mujeres y de esta forma finalizar el famoso dicho “hay que ponerse en forma para llegar al verano”, pero realmente ¿hay que llegar al verano en forma?

​

Es así como decenas de mujeres subieron a sus diferentes redes fotos de sus cuerpos reales, mostrando sus panzas, estrías, tatuajes y manchas con el hashtag #HermanaSoltaLaPanza.

Esto permitió visibilizar lo que es un cuerpo real y de esta forma visualizar para que otras mujeres sientan cierta inclusión, ya que todos los cuerpos son perfectamente imperfectos.

bottom of page